El 04 de noviembre (2019) iniciamos un proceso de mejoras alimentarias con un especialista en atletas de alto rendimiento debido a que queríamos ordenarnos con las prioridades reales de un atleta. No sólo queríamos aprender a correr bien bien, sino que buscábamos a un equipo, un entrenador que nos guiara y estos pequeños cambios, nos llevó a cuidarnos la alimentación.
Hemos llegado a la conclusión de que se requiere un balance en todos los aspectos de la vida del atleta (en este caso) y para realmente ver cambios y obtener resultados, es haciendo que cada cosa tenga un objetivo establecido. Desde dormir bien, comer a las horas hasta hidratarse cuando se debe.
En esa misión, nos encontramos. Conociendo nuestros cuerpos, asombrándonos de los cambios, captando cada día y su avance, visualizando mejoras en la respiración, concientizando los movimientos y su frecuencia. Que delicia, cuando hay tanto por aprender en este mundo y yo que me muero por entender cada cosa que leo, por probar todas las recetas y comprender porque una cosa o la otra sucede en nuestro cuerpo.
Sin embargo, no ha sido fácil fácil, sería mentirles. En lo personal, paso mis tardes imaginando donas, pie de limón, hamburguesas, pizza, chocolates, dulces, popis, gomitas, todo lo que se les ocurra que engorde mil. El punto es que a pesar de todos esos pensamientos rondando en mi cabeza, no he pecado en estos 15 días pero vaya que ha sido un esfuerzo IMPRESIONANTE de mi parte.
Pero bueno, hasta de eso estoy aprendiendo, a controlar los impulsos, en recordarme porqué inicié, en consumir contenido digital saludable, en identificar los picos de ansiedad y bajarlos con un té verde, en fin, estoy aprendiendo a escucharme. Wowww qué más importante que eso??
Vean los primeros resultados...
Este es mi nuevo viaje, y quiero compartirlo acá, para que viajemos juntos en esta nueva experiencia.
Si andan en las mismas que nosotros o gustan compartirnos sus palabras de motivación, los leemos en nuestros comentarios.
Gracias por leerme,
Candy
Hemos llegado a la conclusión de que se requiere un balance en todos los aspectos de la vida del atleta (en este caso) y para realmente ver cambios y obtener resultados, es haciendo que cada cosa tenga un objetivo establecido. Desde dormir bien, comer a las horas hasta hidratarse cuando se debe.
En esa misión, nos encontramos. Conociendo nuestros cuerpos, asombrándonos de los cambios, captando cada día y su avance, visualizando mejoras en la respiración, concientizando los movimientos y su frecuencia. Que delicia, cuando hay tanto por aprender en este mundo y yo que me muero por entender cada cosa que leo, por probar todas las recetas y comprender porque una cosa o la otra sucede en nuestro cuerpo.
Sin embargo, no ha sido fácil fácil, sería mentirles. En lo personal, paso mis tardes imaginando donas, pie de limón, hamburguesas, pizza, chocolates, dulces, popis, gomitas, todo lo que se les ocurra que engorde mil. El punto es que a pesar de todos esos pensamientos rondando en mi cabeza, no he pecado en estos 15 días pero vaya que ha sido un esfuerzo IMPRESIONANTE de mi parte.
Pero bueno, hasta de eso estoy aprendiendo, a controlar los impulsos, en recordarme porqué inicié, en consumir contenido digital saludable, en identificar los picos de ansiedad y bajarlos con un té verde, en fin, estoy aprendiendo a escucharme. Wowww qué más importante que eso??
Vean los primeros resultados...
Si andan en las mismas que nosotros o gustan compartirnos sus palabras de motivación, los leemos en nuestros comentarios.
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