Esa fue la pregunta que me hizo muchas personas cuando les contaba de la idea de "aprender a nadar", (porque con costos y perrito para no morir en los próximos 5 minutos sabía hacer), sin embargo a pesar de mis limitaciones con el agua, tampoco se me había ocurrido practicarlo y menos pensar que me podría gustar mucho.
La idea sobre las clases de natación, nació el año pasado, cuando Davis y yo descubrimos que hacer deporte juntos, le aportaba muchísimo encanto a la relación, empezamos a compartir nuevas experiencias, moldeamos pensamientos, hicimos nuevos amigos, nos gustaban los resultados que veíamos en nuestro cuerpo y lo mejor, nos permitía visualizarnos como pareja practicando otros deportes en conjunto. Así fue como un día, pensamos ¿por qué no prepararnos para un triatlón?
Creo que enloquecimos por un momento, la idea se ponía cuesta arriba cuando nos percatamos que NO SABÍAMOS NADAR! Y sí, había que empezar por el inicio... aprender a nadar y así fue como algunos meses después, iniciamos clases de natación.
Los primeros días fueron todo un reto para mí. El agua fría y yo no somos muy amigas, las clases son a las 7am, entonces se pueden imaginar la temperatura de una piscina al aire libre...a punto de congelo. Luego, empezaron los días de ahogo y tomada de agua de piscina, incluso vamos con la segunda ronda de nuevos "amigos" (los de la primera, se quedaron en el camino, como a muchos les pasa...)
Agregamos a nuestra rutina de piscina, 45 minutos de running, entonces la estrategia de los días de natación es irnos corriendo a las clases y luego devolvernos corriendo a casa (aprox 8.5 km). Al finalizar la rutina, quedamos full cansados pero el sentimiento que genera es parecido al que se siente cuando "te dicen que pasaste ese examen que creías imposible de pasar" y digo imposible, porque eso pensaba cuando me hablaban de los "entrenamientos dobles"... pero bien, cada vez mi cuerpo siente mejor esa combinación de ejercicios, la recuperación es más rápida y me motiva a pensar, que lo mismo sucederá cuando inicie mis rutinas en la bicicleta...
Poco a poco y sin darnos cuenta, el tiempo ha pasado y la natación ahora se ha convertido en una forma más de comunicarnos con nuestro cuerpo, es demasiado chiva, ese momento justo antes de empezar la rutina, ajustarse los lentes, respirar profundo y donde metes la cabeza dentro del agua, abres los ojos en el agua y ves tooodo azul: mi mente, me dice "Morniiiing Beauty, a lo que vinimos" y booom empieza la acción.
Han pasado 4 meses y los días de natación se han convertido en mis días favoritos de la semana! Y sí, no era suficiente con correr, en mi mente, nunca es suficiente y aplica para todo.
Y ustedes, practican algún deporte, han descubierto alguna nueva pasión o pasatiempo en los últimos meses? Cuéntamelo todo.
Co-fundadora La Producción CR
